
Distintas zonas de Carabanchel durante las fiestas de San Isidro.
El infierno de "ruidos y botellón" de los vecinos de Carabanchel los días de San Isidro: "Vivimos al lado de un 'rave' constante"
Los vecinos del barrio de San Isidro denuncian que, durante dos semanas, su barrio se llena de suciedad y se producen peleas entre los asistentes a las fiestas.
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Madrid celebra su patrón: San Isidro. Este año, desde el sábado 3 de mayo, hasta el día 15, la capital se llena de fiestas, música, bailes y planes de ocio que hacen disfrutar a muchos madrileños. Pero por desgracia no todos disfrutan de estos días de verbena, ya que hay algunos que miran con terror el calendario cuando se aproxima el patrón. Se trata de los vecinos de Carabanchel que viven a pocos metros de la explanada del parque de San Isidro, que denuncian que, durante 15 días, su barrio se convierte "en un macrobotellón" y conviven con "ruidos constantes, suciedad" e incluso "peleas".
Los vecinos están tan cansados de esta realidad que han creado una plataforma para dar visibilidad a su problema. Una portavoz explica en conversación telefónica a Madrid Total que este infierno de ruidos se lleva produciendo desde hace unos "15 años": "Nosotros no estamos en contra de la feria de San Isidro, pero ya no es una romería, se ha convertido en un negocio que dura dos semanas".
"Durante una semana se monta un parque de atracciones en el recinto a 17 metros de la primera línea de viviendas. La nuestra es una colonia antigua, por lo que muchas casas son viejas y es imposible aislarse de los ruidos. Para colmo, por las calles estrechas pasan los tráileres de los camiones que, al girar, destrozan las esquinas, que luego nunca se han reparado", explican estas fuentes.
A las atracciones se le suman "los macroconciertos" y las diversas actividades que se desarrollan en el parque de San Isidro durante los días festivos "El Ayuntamiento calcula que, dependiendo del artista, los conciertos tienen una afluencia de entre 30.000 y 60.000 personas, que se meten en un parque pequeño al lado de las viviendas", relatan estas fuentes.
Al problema de los ruidos, se le suma el de la movilidad. La portavoz de la citada plataforma vecinal, que reside muy cerca del parque, explica que "es imposible desplazarse en coche", ya que "muchas calles están cortadas" y es imposible encontrar aparcamiento.
Nuestros dirigentes han convertido la Feria de San Isidro en una verdadera tortura para l@s vecin@s.
— Si San Isidro levantara la cabeza... (@RaveSanIsidro) May 3, 2025
Aquí tenéis sólo un ejemplo. #OtraFiestaEsPosible#SanIsidroSostenible#VecinosHartos#RespetoVecinalYA#MadridNoDuerme#SanIsidroInvasivo #CallesParavivirNoParaOcupar pic.twitter.com/ySSmYFiAJR
Otro de los principales problemas que denuncian los vecinos es que el recinto se ha convertido en una "rave constante" que, los fines de semana, dura hasta las 5.00 de la mañana: "La bebida en los puestos es cara, por eso muchos asistentes se traen litronas de cerveza y botellas de alcohol para hacer botellón. Acampan en todo el parque, que queda arrasado y lleno de suciedad".
"Queda todo lleno de basura, de orines e incluso de excrementos humanos. El hedor que se produce en las calles es horrible, por eso, muchos vecinos han llegado a salir a la calle con lejía para limpiar la zona cercana a su portal", cuentan estas fuentes.
Si no fuera suficiente, a estos problemas se les suman "las peleas". "Hemos visto reyertas con armas blancas en las que los implicados han terminado heridos. Hubo un año que una persona fue apuñalada en la pradera y, como la movilidad es complicadísima, tuvo que venir un helicóptero a socorrerle", explica esta vecina de Carabanchel.
El pasado domingo, de hecho, fue detenido un menor en el parque de San Isidro por llevar una pistola de 8 milímetros. Tan solo una semana antes un joven de 21 años también fue detenido en la pradera de San Isidro por agredir sexualmente a una menor de 17.
Por desgracia, muchos vecinos no pueden permitirse "marcharse dos semanas de sus casas": "Cuando las festividades eran una semana, todavía se podía aguantar, pero ahora son dos y la verdad es que es muy complicado vivir así".
De este modo, esta vecina de Carabanchel termina la conversación reafirmando que nadie en el barrio está en contra "de la feria de San Isidro", pero piden que se respeten "las normas de convivencia, de civismo" y que el barrio "no termine lleno de basura" durante los días del patrón.