Diana Larrea: 'Maroussia Valero', 2024. Foto: Diana Larrea / Espacio Mínimo
Diana Larrea, el exitoso y emotivo rescate de las artistas borradas de la historia del arte
La exposición de la galería Espacio Mínimo de Madrid es una alentadora tentativa de visibilización de las artistas que olvidó la historiografía canónica.
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“Anónimo era mujer” es una de las citas más conocidas de Una habitación propia, de Virginia Woolf. Luego, Simone de Beauvoir en El segundo sexo definiría a las mujeres como aquellas que carecen de historia. De ahí que, desde el feminismo de la segunda ola en los años setenta, haya habido empeño en la recuperación de nombres y obras.
La artista multimedia Diana Larrea (Madrid, 1971), desde 2017, a raíz de la performance Queridas viejas de su compañera de estudios María Gimeno modificando la Historia del arte de Gombrich, decide hacer suyo este empeño. Primero, con su difusión en redes sociales de cientos de artistas mujeres con una inteligente selección de obras en Tal día como hoy.
Una investigación que concreta en la importante serie De entre las muertas, 2020, con un centenar de autorretratos de pintoras pasados a negativo, a modo de radiografías azuladas que evocan las cianotipias del primer libro de fotografía publicado por la botánica Anna Atkins, y a los que acompaña con una sucinta biografía. Y luego, en el audiovisual Una artista para cada día, 2021, con un lenguaje muy actual dirigido a los jóvenes.
Después, Larrea, embargada por el compromiso ligado al aserto de Woolf, ha proseguido con el intento de la recuperación material de las obras de artistas mujeres. Pues si la omisión y el borrado han sido constantes desde el inicio de la historia del arte con las Vite de Vasari, incluso de las que fueron célebres y muy cotizadas en su época, en realidad, como se constata en varios diccionarios de artistas españolas hasta la Guerra Civil, gracias a documentos diversos, conocemos muchos más nombres que obras, todavía sin localizar hasta hoy. Una búsqueda un tanto retardada en nuestro país pero que poco a poco va dando resultados.
Desde la primera y pequeña muestra Dibujos de Rosario Weiss en el Museo Lázaro Galdiano en 2015, en cada exposición de una artista olvidada han aflorado piezas aún en manos privadas. Hallazgo ocurrido desde entonces en contadas ocasiones, lo que indica la escasa investigación desde los departamentos de conservación de los museos.
Diana Larrea: ' María de los Ángeles López-Roberts: Maria Antonieta', sin datar. Foto: Diana Larrea / Espacio Mínimo
Y subraya, además, la importancia de la constancia de Diana Larrea, bien acompañada por su galerista Luis Valverde, al plantear ahora tres casos de estudio de artistas de sucesivas generaciones que padecieron la dictadura franquista. Y que, como era de esperar, ya ha comenzado a dar sus frutos.
La pintora Maroussia Valero (1892-1955), la ilustradora María de los Ángeles López-Roberts (1902-1973), modernas sinsombrero y cosmopolitas, y la muralista Justa Pagés (1917-2011) son las protagonistas de sendos documentales, cuya investigación atestigua su borrado también de las casas y de las calles donde vivieron.
![Diana Larrea: 'María de los Ángeles López-Roberts (1902-1973), Detalle', 2023. Foto: Diana Larrea / Espacio Mínimo](["https:\/\/s1.elespanol.com\/2025\/04\/24\/actualidad\/1003743728877_255045418_1706x1252.jpg"])
Diana Larrea: 'María de los Ángeles López-Roberts (1902-1973), Detalle', 2023. Foto: Diana Larrea / Espacio Mínimo
Omisiones en los rótulos que enlazan con el activismo callejero de Larrea en su etapa anterior. Tres videoinstalaciones, con preciosos papeles de fondo dibujados con motivos de las artistas y variado mobiliario doméstico retro, que invocan nuestra empatía con un muy acertado énfasis afectivo.
