La reina Letizia saludando a Melania Trump, este sábado, 26 de abril, en el Vaticano.
El saludo de Letizia a Melania Trump en el funeral del Papa Francisco que "desubica" a la mujer del presidente de EEUU
Este sábado, 26 de abril, en la plaza de San Pedro, los reyes de España han compartido zona reservada con Donald Trump y su esposa.
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El mundo entero, sin atisbo de exageración, tenía los ojos puestos este sábado, 26 de abril, en la Ciudad del Vaticano, donde se ha celebrado el funeral del Papa Francisco, fallecido a los 88 años el pasado lunes, 21 de abril. La despedida del Sumo Pontífice ha reunido a líderes políticos, primeras damas y representantes de Casas Reales de todo el mundo.
Desde España, como no podía ser de otro modo, han representado a la Corona los reyes Felipe VI (57 años) y Letizia (52). Convirtiéndose en una de las anécdotas de la jornada, los monarcas españoles han compartido la explanada de asientos con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump (78), y su esposa, la primera dama Melania Trump (55).
En este marco regio y solemne, se ha producido el esperado reencuentro entre Melania y la reina Letizia. En un momento dado, ambas coincidieron en la zona reservada para las autoridades. Lo hicieron respetando al máximo las normas de protocolo; vestidas de riguroso negro y luciendo mantilla.
Melania Trump saludando a Felipe VI, este sábado, 26 de abril. EFE
A la luz de las imágenes, se aprecia que Letizia y Melania se intercambian un breve saludo. Todo ello, dentro de la cordialidad y la formalidad estricta. Así como hay crónicas que sostienen que el apretón de manos que se cruzan Donald Trump y Felipe VI ha sido más ameno, califican el saludo de las mujeres de éstos como fugaz y "frío".
Este momento se produce cuando la comitiva estadounidense se disponía a ocupar sus asientos. El mandatario norteamericano fue el primero en hacer el ademán de saludar. El hijo del emérito Juan Carlos (87) responde, raudo y efectivo. Acto seguido, les toca el turno a Letizia y a Melania. Es entonces cuando la primera dama se queda "desubicada".
Todo ello, según la opinión de una experta en protocolo, consultada por Lecturas. Antes de ahondar en este extremo, conviene explicar que la disposición de Donald y de su mujer ha sufrido un cambio de última hora, pues, en un principio, había quedado estipulado que presidente y esposa se sentaran detrás de las realezas europeas.
No obstante, algo aconteció que, finalmente, lo han hecho a la vera de Felipe VI y Letizia. María José Gómez Verdú, la experta consultada, aclara en primer término que este cambio no se entiende como un fallo de protocolo.
Los Reyes sentados junto a Donald Trump y su esposa, Melania.
"La disposición de los asientos en actos oficiales de alto nivel, como aquellos en los que coinciden jefes de Estado, miembros de Casas Reales y primeras damas, responde a normas protocolarias muy precisas, aunque no inamovibles", asegura.
"La presencia de Melania Trump junto a la reina Letizia podría responder a una deferencia hacia la Primera Dama de Estados Unidos como figura de alto rango representativo, especialmente en un contexto donde la visibilidad y la cercanía adquieren una carga simbólica relevante", reflexiona Gómez Verdú.
En lo que respecta al breve saludo de ambas mujeres, se desliza: "La brevedad y frialdad del saludo captado por las cámaras, en el que la Reina no se detuvo y retomó su posición de inmediato, dejando a Melania momentáneamente desubicada, no puede interpretarse como un gesto de desdén, sino más bien como una acción cuidadosamente medida".
"En estos actos, el protocolo establece tiempos y recorridos milimetrados, especialmente cuando las jerarquías están claramente delimitadas. La reina Letizia, sabedora del papel que ocupa y del mensaje que transmite cada gesto, evitó extender innecesariamente el saludo para no crear ambigüedad en el orden protocolario", concluye esta profesional.
Dónde descansará el Papa
Una imagen captada durante el funeral del Papa Francisco. Gtres
El funeral del Papa Francisco en la plaza de San Pedro ha terminado poco después de las 12.00 horas de la mañana, tras una solemne y emotiva ceremonia en la que se ha recordado el legado del pontificado de Francisco ante los principales mandatarios mundiales.
Tras la ceremonia, la procesión pasa por la galería Príncipe Amadeo de Saboya, recorre el Corso Vittorio Emanuele y llega a la plaza Venezia, para luego girar hacia los Foros Imperiales. Desde ahí, toma la Via Labicana y la Via Merulana, dejando al fondo San Juan de Letrán, hasta llegar a la plaza de Santa María la Mayor, donde descansará el Primer Papa latinoamericano y jesuita.
Un vehículo ha transportado "a paso de hombre" el féretro de Francisco. El coche fúnebre que lleva el féretro del papa Francisco del Vaticano a la basílica romana de Santa María La Mayor es un papamóvil adaptado para esta ceremonia fúnebre y que el Pontífice usó en un viaje a Oriente.
