
La alondra capuchina con pico lleno de insectos. Istock
Las aves europeas pueden ser "más susceptibles" a los cambios rápidos por el calentamiento global, según un estudio
Una investigación publicada en la revista 'Journal of Biogeography' analiza los efectos del cambio climático en las especies que habitan en la UE.
Más información: 10 especies de aves en peligro de extinción y cómo te afecta su alarmante desaparición
"Las especies de aves, ya sean raras o ampliamente distribuidas, con nichos climáticos más estrechos, pueden ser más susceptibles a los cambios rápidos provocados por el calentamiento global en comparación con aquellos con nichos más amplios". Esta, indica Karolika Zalewska, investigadora de posgrado de la Facultad de Ciencias Ambientales de la Universidad de East Anglia (UEA), fue la principal conclusión del estudio del que es coautora.
Su objetivo, explica el informe, era examinar si los esfuerzos de conservación podrían identificar y proteger de manera más efectiva a las especies que corren mayor riesgo por el cambio climático al comprender mejor la variedad de condiciones específicas que necesitan para prosperar.
Para lograrlo, el grupo de expertos analizó la relación entre la extensión de las condiciones climáticas que las aves toleran y en las que las poblaciones pueden sobrevivir (conocida como amplitud del nicho climático) y su probabilidad de declive en respuesta al calentamiento global. Y es que, apunta Zalewska, "decidir qué especies corren mayor riesgo no es sencillo y pueden estar disminuyendo por diversas razones".
En un principio se consideraba que las aves raras y aquellas con distribuciones más pequeñas tenían mayor probabilidad de ser vulnerables a los efectos de la crisis climática. Sin embargo, los nuevos hallazgos de esta investigación han demostrado que las especies con mayor asignación, como el gorrión común o el estornino pinto, también pueden enfrentar amenazas en sus poblaciones.
Las claves del estudio
"Ante los desafíos de la crisis global de la biodiversidad y el cambio climático, la evaluación rápida de la vulnerabilidad de las aves a las mutaciones ambientales se ha vuelto crucial para abordar las prioridades de conservación. A medida que el calentamiento global se acelera, este estudio destaca la necesidad de priorizar las especies con mayor riesgo debido a sus necesidades más limitadas", subraya Aldina Franco, coautora y profesora de la Facultad de Ciencias Ambientales de la UEA.
¿Cómo lo hicieron? Los investigadores se basaron en datos sobre las tendencias poblacionales de 159 especies de aves reproductoras europeas en 29 países, provenientes del Esquema Común Paneuropeo de Monitoreo de Aves. A continuación, utilizaron 30 años de datos de áreas de reproducción para construir representación de sus nichos climáticos y crearon un nuevo índice de amplitud de nicho.

Búho halcón del norte escondido en un árbol. Istock
Tuvieron en cuenta, además, factores adicionales, tales como el tipo de hábitat primario, el estado migratorio y la masa corporal promedio, lo que más adelante se utilizó para conocer cómo estas variables influyen en las tendencias poblacionales a largo plazo.
De este modo, señala el reporte publicado en la revista Journal of Biogeography, se concluyó que la disminución de aves europeas está relacionada con la variedad de condiciones climáticas que experimentan. Y es que, dice Zalewska, "estos hallazgos nos ayudan a comprender las amenazas asociadas al calentamiento global y permiten una evaluación rápida de la importancia de los factores climáticos en las tendencias poblacionales, lo que proporciona una herramienta invaluable para la conservación de especies".
En particular, continúa Zalewska, demuestran que "el índice de amplitud del nicho climático en relación con el área de distribución puede ayudar a predecir qué especies podrían ser más vulnerables a la disminución poblacional".
Los principales hallazgos
Si bien, señala el informe, se podría esperar que las aves con distribuciones geográficas más amplias experimenten una gama mayor de condiciones climáticas y, por lo tanto, sean más resilientes al cambio ambiental, las recientes disminuciones de poblaciones de especies con estas características sugieren que otros factores pueden estar involucrados.
Por este motivo, los expertos proponen incorporar los nichos climáticos de las especies en las evaluaciones de riesgo del calentamiento global para informar mejor de las estrategias de conservación. Argumentan que la variación en las condiciones ambientales dentro del rango de distribución de un ave puede proporcionar mayores matices para comprender su resiliencia a los factores relacionados.
Los hallazgos enfatizan en la importancia de comprender e incorporar el nivel de exposición a la variabilidad ambiental al evaluar la vulnerabilidad al calentamiento global y las disminuciones poblacionales a largo plazo. Y es que, aseguran los investigadores, "el cambio climático antropogénico se ha identificado una vez más como una amenaza importante para la biodiversidad global".
Indican, además, que es probable que la magnitud de esta amenaza sea desigual entre especies, debido a las diferencias en sus ciclos de vida o a la exposición a cambios ambientales, ya que algunas condiciones, como las variables de temperatura y la pluviosidad, están más extendidas que otras en distintas zonas geográficas.
Por el momento, señalan, 58 de las especies incluidas en el estudio presentaron una tolerancia poblacional decreciente, 68 se mantuvieron estables y 33 estuvieron en aumento. En concreto, pudieron determinar que aquellas aves asociadas con hábitats agrícolas tenían más probabilidades de estar disminuyendo, mientras que las capaces de tolerar entornos modificados por el hombre, incluidos los mirlos y los herrerillos azules, contaban con mayor capacidad de experimentar tendencias crecientes de población.