La lenta agonía de Gaza: "asfixiada", "muriendo de hambre" y asediada por órdenes de desplazamiento forzoso

Un "horror inimaginable". Así de contundente es el director regional de UNICEF para Oriente Medio y África del Norte, Edouard Beigbeder, al describir la situación que vive Gaza.

Las palabras que elige este representante de Naciones Unidas no son capaces de condensar toda la frustración, el miedo y la desesperación de la pesadillesca situación que se respira en la Franja desde finales de 2023.

Las oenegés sobre el terreno llevan meses trasladando a ENCLAVE ODS que la situación es límite, que "el castigo colectivo" es "inhumano" y está arrasando con la población civil y acabando con cualquier atisbo de una posible paz futura.

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Lo vivido durante los últimos días, además, no tiene nada que envidiar a cualquier película de terror.

"En un período de 72 horas este fin de semana, las imágenes de dos ataques atroces proporcionan aún más pruebas del precio incalculable que los niños y niñas de la Gaza están pagando a causa de esta guerra despiadada", lamenta Beigbeder en un comunicado.

Y continúa: "El viernes [23 de mayo] vimos vídeos de los cuerpos de los niños quemados y desmembrados de la familia Al-Najjar cuando los estaban sacando de los escombros de su casa en Khan Yunis. De 10 hermanos menores de 12 años, solo ha sobrevivido uno, que está con heridas críticas".

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"A primera hora del lunes [26 de mayo], vimos imágenes de un niño pequeño atrapado en una escuela en llamas en la ciudad de Gaza. Ese ataque, en las primeras horas de la mañana, mató según los informes al menos a 31 personas, incluidos 18 niños y niñas", prosigue.

Y zanja: "Estos menores —vidas que nunca deberían reducirse a números— ahora forman parte de una larga y desgarradora lista de horrores inimaginables". Porque, insiste Beigbeder, nos enfrentamos "a la destrucción de la vida misma en la Franja de Gaza".

"Qué nivel de horror"

Beigbeder insiste en que "las graves violaciones contra la infancia" que viven los gazatíes han provocado que, desde el fin del alto el fuego unilateral el pasado 18 de marzo, la ONU contabilice la muerte de 1.309 menores.

Los niños heridos ascienden, a fecha del 28 de mayo, a 3.738. En total, recuerda el responsable de UNICEF en la zona, se estima que más de 50.000 niños hayan sido asesinados o resultado heridos por los ataques del ejército israelí.

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"¿Cuántos cadáveres de niñas y niños más harán falta? ¿Qué nivel de horror debe ser transmitido en directo antes de que la comunidad internacional actúe plenamente, use su influencia y tome medidas valientes y decisivas para forzar el fin de esta matanza de niños implacable?", implora.

El horror, explican desde Médicos Sin Fronteras (MSF), toma forma en las 600.000 personas que se han visto desplazadas "de nuevo" desde aquel nefasto 18 de marzo.

"Infierno en la tierra"

"Son 31 las órdenes de desalojo emitidas desde entonces, lo que supone que en la actualidad las zonas militares prohibidas para la población gazatí cubran alrededor del 80% de Gaza", aseguran desde la oenegé médica.

Y es que, insisten, "durante estos dos meses y medio, ninguna zona de la Franja ha quedado a salvo de los ataques". Lo mismo vienen recordando desde la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA).

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El bloqueo de la ayuda humanitaria, la hambruna, el constante desplazamiento forzado y la destrucción de hospitales, sistemas de agua, escuelas y hogares están convirtiendo, como insisten desde MSF, en un verdadero "infierno en la tierra".

La oenegé médica insiste en un comunicado en que Gaza está siendo "ahogada deliberadamente" y al borde del colapso.

Omar Alsaqqa, responsable de logística de MSF, asegura que sus compañeros sobre el terreno están "desesperados". Pues "no quedan tiendas de campaña ni espacio para que la gente se instale".

Alsaqqa confiesa no saber "qué responder" cuando le preguntan "dónde pueden ir con sus hijos en mitad de la noche". "Se nos están agotando las opciones para permanecer con vida", lamenta.

Porque, como indica Claire Manera, coordinadora de emergencias de MSF, "las fuerzas israelíes están destruyendo todos los medios de vida de los palestinos en Gaza mediante una guerra psicológica y física cruel y despiadada".

Y apunta a los desplazamientos forzados como parte de una "campaña de limpieza étnica llevada a cabo por las fuerzas y autoridades israelíes contra la población palestina".

Ayuda insuficiente

Es el último informe actualizado de la situación en Gaza de la UNRWA, publicado este 26 de mayo, el que confirmaba que "tras más de dos meses de bloqueo, las autoridades israelíes han autorizado la entrada de casi 400 camiones de ayuda, pero solamente se han podido recoger los suministros de 115, y nada ha llegado al norte asediado".

A esto se suma que, en la mañana del 28 de mayo, el diario israelí Haaretz aseguraba que la entidad privada que se encarga de distribuir la ayuda en la Franja, Fundación Humanitaria de Gaza, apoyada por Israel y EEUU y criticada por las oenegés, interrumpía el reparto de alimentos.

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Esto sucedía tras una caótica jornada que dejó al menos 47 heridos por disparos del ejército israelí, como indica el jefe de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en los Territorios Palestinos Ocupados, Ajith Sunghay.

Desde UNICEF aseguran haber "entregado con éxito 21 camiones de suministros nutricionales vitales con alimentos, medicinas y suplementos".

Sin embargo, desde la agencia especializada en infancia lamentan que "el volumen de ayuda entregado sigue siendo absolutamente insuficiente para abordar las inmensas y crecientes necesidades de la población general y los niños y niñas gazatíes".

E insisten en que "las cantidades entregadas no cubren ni de lejos las necesidades acuciantes" de los pequeños de la Franja.

Hambruna e inanición

El Comité de Emergencia Español, conformado por Aldeas Infantiles SOS, Educo, Médicos del Mundo, Oxfam Intermón, Plan International y World Vision, tilda la situación de Gaza como de "grave riesgo de hambruna".

Esta situación, de que las oenegés y los trabajadores humanitarios llevan meses alertando, se está volviendo insostenible. "Los suministros esenciales como alimentos y medicamentos se han agotado y niños, niñas y sus familias se enfrentan a la inanición si no reciben ayuda humanitaria de forma inmediata".

Palestinos que buscan ayuda se reúnen cerca de un centro de distribución de ayuda administrado por la Fundación Humanitaria de Gaza, respaldada por Estados Unidos , en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 27 de mayo de 2025. Reuters

No por nada el pasado martes, el subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Tom Fletcher, alertaba de que unos 14.000 bebés morirán en la Franja de Gaza en los próximos días si no entran alimentos y medicamentos.

Los datos de la Integrated Food Security Phase Classification (IPC), que mide la inseguridad alimentaria en el mundo, afirman que al menos 470.000 personas se enfrentan a una "hambruna catastrófica" en Gaza.

Asimismo, "todas las personas en Gaza sufren inseguridad alimentaria aguda", según los datos de la plataforma.