El precio, un lastre para el taxi en Madrid: el 74% de los usuarios lo critica frente a las tarifas cerradas

Una de las características tradicionales de los taxis es el uso del taxímetro. Este aparato que mide la distancia y el tiempo recorridos durante el trayecto para calcular el precio total del servicio hace que no se sepa el precio final hasta que no se haya llegado al destino.

Este es para los usuarios el aspecto principal que valoran negativamente a la hora de escoger un taxi para desplazarse en Madrid. De hecho, así lo opina el 74% de los usuarios.

Estos datos se han recogido de un estudio elaborado por el Mobility Institute (una iniciativa de RACC en asociación con Deloitte) en colaboración con Freenow -la app de movilidad con foco en el taxi-, presentado este jueves en Madrid. Un informe que ofrece una radiografía actualizada del sector en Madrid recogida a través de más de mil encuestas a taxistas y ciudadanos.

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De esta manera, en él se desprende que el precio cerrado o la aplicación de tarifas reguladas más flexibles (que, por ejemplo, ajusten los precios en momentos de baja demanda) son las principales medidas que demandan los madrileños para incrementar el uso del servicio de taxi.

Así, se analiza que los ciudadanos de la capital le dan una importancia de 8,1 sobre 10 a la flexibilidad de las tarifas y de 8,8 sobre 10 al uso de los precios cerrados.

Taxistas "en contra"

En contraposición, los taxistas no opinan que el precio sea un problema para sus clientes. Exactamente, solo el 16% valora esto como algo negativo para ellos.

De hecho, un 80,3% considera que el taxi es un sector bien valorado por sus clientes y un 73,5% por la ciudadanía en general. Sin embargo, el dato por parte de los usuarios es diferente, siendo un 52% el que piensa que está valorado positivamente.

Los taxistas achacan esto a un servicio que es percibido como anticuado, aunque realmente el problema señalado radica en el precio.

"Muchas veces el propio sector del taxi es el principal enemigo del sector del taxi. El precio cerrado ha generado mucha polémica y es el aspecto mejor valorado por los usuarios. En Madrid, en torno al 70% de usuarios lo utilizan. A pesar de ello, hay una parte del sector que está en contra de aplicarlo", explica Isabel García Frontera, directora general de Freenow en España, durante su ponencia en la presentación de este jueves.

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Cuenta que en dicha plataforma dan la posibilidad de prestar este servicio, "pero no siempre lo hacen". Además, apunta que hay unos 4.000 taxis operando con ella en Madrid.

"Al final lo que no podemos pretender es quedarnos como estamos. Hay que adaptarse a lo que necesita el usuario, poner al usuario en el centro y evolucionar hacia un sector que funcione como lo piden los clientes", dice.

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Para incrementar el atractivo de moverse en taxi por Madrid, los encuestados en dicho informe también abogan por alcanzar acuerdos estratégicos con grandes eventos que se celebran en la capital. De esta forma, explican, "se ofrecería una respuesta aún más eficiente en picos de demanda y se posicionaría al taxi como una alternativa sólida y accesible dentro del esquema de la movilidad urbana".

Asimismo, se plantea la integración tarifaria con el transporte público como otra de las medidas clave para facilitar la intermodalidad. Permitiría que tanto los residentes de la Comunidad de Madrid como los que visitan la capital pudieran combinar ambos servicios en un mismo trayecto con mayor facilidad y con beneficios económicos, según recoge el estudio.

Casi 17.000 taxistas

En Madrid operan 15.776 licencias de taxi y hay casi 17.000 taxistas. El 75% de los ciudadanos considera que el actual volumen de taxis circulando en la ciudad es suficiente para cubrir sus necesidades de movilidad.

Los picos de demanda de este servicio en la capital se encuentran en los días del fin de semana (de jueves a sábados), con una alta demanda nocturna. También se observa una demanda elevada de lunes a jueves por la mañana, en las horas punta.

Los motivos más frecuentes para su uso son las actividades lúdicas, los desplazamientos a estaciones de tren o el aeropuerto y los motivos laborales. Además, el 63% de los madrileños se decanta por contratar un taxi a través de plataformas digitales, frente al 48%, que sigue utilizando la mano alzada; el 30%, que lo hacen por teléfono, y el 33% que recurre a la parada de taxis.