Valencia - Casademont Zaragoza. Valencia Basket
Otro cruel desenlace en Valencia: el Casademont Zaragoza se ahoga en la orilla en el primer asalto de la gran final
Las aragonesas han rozado la remontada con una gran segunda parte en La Fonteta, pero el vigente campeón se lleva el primer partido de la serie por 75-65.
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El Casademont Zaragoza ha tenido en sus manos escribir otra noche histórica para el club. Las de Carlos Cantero han rozado el triunfo ante el Valencia Basket en el primer duelo de la final de la Liga Femenina Endesa, que se juega al mejor de tres. Después de ir todo el encuentro por detrás en el marcador, una gran segunda mitad ha permitido que las rojillas vieran posible la remontada cuando estaban solo a un punto de su bestia negra. Sin embargo, las de Rubén Burgos han impuesto su talento y poderío en todos los aspectos y han conseguido llevarse la primera ventaja en La Fonteta (75-65). Pese a la derrota, el Casademont Zaragoza ha demostrado, por si había dudas, que va a luchar hasta el final por el título.
Día grande e ilusionante para el Casademont Zaragoza y todo el baloncesto aragonés. Las chicas de Carlos Cantero disputaban este jueves el primer partido de la final de la Liga por primera vez en su historia ante el todopoderoso Valencia Basket. De hecho, las aragonesas llegaban sin haber ganado nunca en La Fonteta. Aun así, el equipo y la Marea Roja tenían licencia para soñar.
Tras eliminar en semifinales al campeón de la Liga regular, el Girona, en una eliminatoria que se decidió en la prórroga, la ilusión se ha instaurado por todo lo alto en Zaragoza, que vivirá un lleno absoluto en el Príncipe Felipe este domingo.
En la pista, Mariona Ortiz lideraba el quinteto inicial junto a Marie Mané, Merritt Hempe, Ellen Nystrom y Mawuli. En las filas rivales, muchas estrellas, con especial atención en la exjugadora rojilla, Leo Fiebich.
La capitana del Casademont Zaragoza abría el marcador, suyas eran las dos primeras canastas zaragozanas. Le entraba también a Mawuli para poner el 4-6 en el electrónico que respondía Turner con el primer triple del encuentro.
Volvía a ponerse por delante el cuadro rojillo con un triple de Hempe y un tiro libre de Evans (9-10), pero entonces, Valencia Basket, con una acertada Mavunga, abría una importante brecha. Yagupova desde el perímetro ponía el 17-10 y ese parcial obligaba a Cantero a pedir tiempo muerto.
Antes del final del primer cuarto, solo sumaba al casillero Evans bajo el aro, mientras Mavunga seguía imponiendo su poderío hasta un duro 21-12.
En el segundo acto comenzaba anotando el conjunto local, mientras que el Casademont Zaragoza se estancaba viendo como no le entraba ningún tiro. La distancia taronja aumentaba cada vez más y en el 27-12, volvía a haber tiempo muerto en pista. Tenía que ser desde la línea de tiros libres cuando las de Cantero retomaban su anotación, que animaba, tras un error de las valencianas, al triple de Ellen Nystrom.
Lo paraba Rubén Burgos, pero en el regreso, Mawuli recortaba desde el 6,75 (27-20). Sin embargo, Valencia no se relajaba ni mucho menos y retomaba la distancia (33-20). Dos tiros de Mané, una gran defensa de Helena Pueyo y la canasta de Mawuli de manera consecutiva daban un poco de ilusión. Otra vez era un mero espejismo y los últimos minutos eran un castigo para las de Cantero. Así pues, el Casademont Zaragoza se iba trece abajo al descanso, 37-24.
Un gran Casademont en la segunda parte
Mejoraban las zaragozanas tras la pausa con un gran trabajo defensivo. Mawuli, Mariona Ortiz y Helena Pueyo ponían los puntos para mantenerse vivas en la lucha, aunque el acierto de Valencia seguía siendo letal.
La canasta de Hempe permitía reducir los 10 de distancia en el marcador, pero Leti Romero, acto seguido, callaba el runrún con un enorme triple. El tercer cuarto continuaba con esa igualdad y alternancia que mantenía en partido a Casademont Zaragoza. Más allá de las afinidades, el duelo estaba realmente bonito para los espectadores neutrales, con un baloncesto digno de final.
Dos grandes canastas, una de Shante Evans y otra de Leti Romero, dejaban a las visitantes a 9 a Valencia (54-45).
La pívot norteamericana abría el último cuarto en una jugada individual que podía sembrar nervios en las de Rubén Burgos. Los nervios en el pabellón valenciano terminaban llegando gracias a la defensa y a las canastas de Helena Oma y Ellen Nystrom, pese a que Leti Romero apagaba los fuegos.
Nystrom provocaba una falta en ataque y ella misma aprovechaba para recortar hasta el 61-55. Entonces, las naranjas tenían que pedir tiempo muerto, pero la sueca anotaba desde el perímetro y el Casademont se quedaba solo tres abajo. Tenía dos ataques para empatar, pero las canastas de Helena Oma no entraban.
El partido era un correcalles cuando Fiebich quería poner calma. Pueyo desde el triple y Mariona a la contra colocaban el 66-65, la mínima distancia. El Casademont Zaragoza creía, pero Valencia se encontraba con tres tiros libres y ya no habría opción.
La había rozado, pero la victoria se le escapaba a las mañas (75-65), que han dado más argumentos para llenar este domingo el Príncipe Felipe. Es posible.
