Gaza recibe la primera ayuda tras tres meses de bloqueo: avalancha por conseguir una de las 8.000 cajas de alimentos

La Fundación Humanitaria de Gaza, una organización respaldada por los gobiernos de Estados Unidos e Israel, ha entrado este martes en el enclave palestino para repartir cajas de alimentos entre decenas de miles de gazatíes que se concentran en la ciudad sureña de Rafah.

La población, hambrienta después de tres meses de bloqueo de entrada de ayuda humanitaria en la Franja por orden de Benjamin Netanyahu, corría hacia el punto de reparto.

Ante la falta de organización y la desesperación por llevarse algo a la boca, se han formado avalanchas de gente.

La organización ha informado de que el volumen de personas que buscaban ayuda en el punto de distribución ha sido tan grande que los equipos han tenido que retirarse para permitir que la gente "recibiera la ayuda de manera segura y se dispersara", ya que han temido que pudiera haber víctimas.

Las imágenes muestran cómo miles de personas caminan por un pasillo alambrado hasta llegar a un amplio campo abierto donde se apilaba la ayuda.

Por redes sociales circulan vídeos de cómo la población derribaba las vallas y se abría paso entre la gente a empujones para poder acceder al lugar.

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El director de la oficina de medios del gobierno de Gaza dirigida por Hamás, Ismail Al-Thawabta, asegura que el Ejército de Israel ha abierto fuego contra la población civil tras perder el control de la situación.

Las fuerzas armadas de Netanyahu niegan las acusaciones y aseguran que eran disparos de "advertencia" que han sido dirigidos hacia una zona lejana al punto de distribución.

Palestinos que buscan ayuda se reúnen cerca de un centro de distribución de ayuda administrado por la Fundación Humanitaria de Gaza, respaldada por Estados Unidos , en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 27 de mayo de 2025. Reuters

La Fundación Humanitaria de Gaza asegura que han podido racionalizar unas 8.000 cajas de alimentos que supondrían un total de 462.000 comidas. Los paquetes incluían arroz, harina, judías en lata, pasta, aceite de oliva, galletas y azúcar.

Se trata de una cantidad ínfima en comparación con la que necesitan las más de dos millones de personas que se concentran en la zona norte de la ciudad de Gaza tras meses sin recibir ayuda humanitaria.

Una persona se arrodilla junto a suministros de alimentos mientras los palestinos que buscan ayuda se reúnen cerca de un sitio de distribución de ayuda administrado por la Fundación Humanitaria de Gaza respaldada por Estados Unidos , en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 27 de mayo de 2025 Reuters

La organización humanitaria, respaldada por EEUU y el país hebreo, ha llevado a cabo esta operación de manera independiente a las que estaba intentando realizar la ONU. Se trata de la primera vez que realizaba una maniobra de este tipo.

Israel, a pesar de que dijo haber dejado pasar a 100 camiones llenos de comida, impidió a estos grupos de trabajo llegar hasta la población.

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La ONU, tras ver las imágenes que ha calificado de "desgarradoras", ha defendido que sus equipos tienen un "plan detallado y fundamentalmente sólido" para poder repartir ayuda a la población "desesperada" de Gaza sin que haya incidentes.

Critica directamente que Israel solo le permita entrar en la Franja en "circunstancias extremadamente difíciles y con muchos obstáculos".

Una fundación con muchas sombras

A principios de mayo, el Departamento de Estado de Estados Unidos anunció que una nueva fundación privada sería la encargada de distribuir ayuda en Gaza bajo un nuevo esquema en el que trabajaban Washington e Israel.

Se trata de la Fundación Humanitaria para Gaza, una organización sin ánimo de lucro registrada en Ginebra en febrero, integrada por exmilitares estadounidenses, empresas privadas de seguridad y operadores humanitarios.

La fundación mantiene un perfil discreto, sin presencia pública ni canales oficiales que brinden información clara o verificable sobre su estructura interna o el modo en que opera.

Sin embargo, investigaciones recientes de medios como Haaretz, The Washingtron Post y The New York Times han comenzado a arrojar algo más de luz sobre el funcionamiento y los vínculos de la Fundación Humanitaria para Gaza, aunque muchos aspectos clave siguen sin esclarecerse.

Según un documento atribuido a esta fundación, la organización planea instalar cuatro centros de distribución en el enclave palestino para entregar alimentos, agua y kits de higiene a hasta 1,2 millones de personas, más de la mitad de la población de Gaza.

El documento dice que la misión de la Fundación Humanitaria para Gaza es "aliviar el sufrimiento" de la población civil de Gaza mediante "la entrega de ayuda vital en estricto apego a los principios humanitarios".

Sin embargo, este domingo el director de la organización, Jake Wood - exmilitar estadounidense y fundador de la empresa privada especializada en respuesta a desastres, Team Rubicon- renunció, advirtiendo en un comunicado distribuido a varios medios que el grupo no puede ceñirse "a los principios humanitarios de humanidad, neutralidad e independencia".

Objetivo: debilitar a Hamás

Según una investigación del New York Times, la creación de la Fundación Humanitaria para Gaza fue una iniciativa israelí, propuesta por funcionarios del Gobierno de Netanyahu en las primeras semanas del conflicto, a finales de 2023.

Según el Ejecutivo israelí, el objetivo de este nuevo sistema de distribución es debilitar el control de Hamás sobre la ayuda humanitaria, estableciendo cuatro puntos en el sur de Gaza donde se entregarían cajas a los cabezas de familia, en lugar de los cientos de puntos -comedores sociales, centros sanitarios, etcétera- que usa actualmente la ONU.

A partir de las investigaciones y la falta de transparencia que rodea a la Fundación Humanitaria para Gaza, han surgido dudas sobre quién financia realmente la organización.