
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, en una imagen de archivo ICAL
La Junta garantiza la seguridad de las plantas de biogás al estar sometidas a un control "muy exigente"
El director general de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental ha rechazado la moratoria pedida por el PSOE, que critica la falta de criterios y de transparencia.
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El director general de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental de la Junta, José Manuel Jiménez, ha garantizado este martes la seguridad de las plantas de biogás en Castilla y León porque su apertura requiere de "un control previo ambiental muy exigente conforme a la normativa nacional y europea".
El socialista José Luis Vázquez, por su parte, ha defendido la necesidad de una moratoria hasta que se acuerden "unos criterios" y exista "transparencia" para los vecinos de las zonas susceptibles de acoger esa infraestructura.
En la Comisión de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de las Cortes, Vázquez ha preguntado por la seguridad de estas plantas ante "la preocupación y zozobra" de los vecinos donde se prevén y por "la falta de una información veraz". "Ante la falta de criterios se impone la unilateralidad, somos el primo pagafantas", ha afirmado.
El socialista ha defendido el biogás pero con seguridad jurídica, sanitaria y ambiental lo que ha considerado que en este momento no está garantizado y censuró que no se tenga en cuenta a 1.360 municipios en los que se puede instalar una planta a menos de 100 metros de su núcleo urbano, conforme a la normativa.
"Es imprescindible una moratoria sine die hasta que se cumpla con la legislación", ha advertido Vázquez, que, además de fijar los criterios, ha demandado que se dé participación y preguntó como va a articular la normativa.
"Están acorralando un espacio natural como las Lagunas de Villafáfila", ha aseverado, donde ha asegurado que se prevén 16 plantas de biogás, a la vez que criticó que se convierta a la Comunidad en "un estercolero".
Beneficios
El director general, que ha descrito el proceso en una planta de biogás, ha manifestado que estas instalaciones no pueden funcionar sin una declaración de impacto ambiental favorable y una autorización ambiental, por lo que ha advertido que estos proyectos se someten al sistema de control previo ambiental "más exigente" de la legislación nacional y europea.
"Me resulta difícil de entender su oposición y pedir una moratoria, estamos obligados a no parar", ha afirmado el director general, que explicó que cuentan con la colaboración de expertos y fruto de ello se elaboraran unos "condicionamientos" que deberán cumplir todas las plantas.
También, ha manifestado que en este momento hay tres plantas en Castilla y León con un funcionamiento correcto y ha asegurado, ante las dudas de Vázquez sobre la falta de personal de la Consejería para realizar los controles, que están "perfectamente capacitados" y que la Comunidad puede "ser ejemplo" de biogás en España.
Jiménez ha recordado que Castilla y León produce 35 millones de subproductos y residuos orgánicos que es una cantidad relevante y se estima que una red de planta podría tratar el 50% de los residuos e inyectar un 50% al consumo energético.
De manera que ha defendido estas plantas no solo para una gestión correcta de estos residuos, sino también para evitar problemas ambientales de emisión de C02 a la atmósfera, avanzar en la descarbonización de la economía, solucionar la dependencia del gas y contar con un recurso que genera actividad económica y empleo en el mundo rural.