
Xabi Alonso, en la presentación como nuevo entrenador del Real Madrid
El mercado de traspasos más corto también será el más loco: el Mundial de Clubes cambia las reglas y acelera los fichajes
Los suculentos premios por participar en el nuevo torneo de la FIFA empujan a los participantes a adelantar sus fichajes a la ventana del 1-10 de julio y sientan las bases para un verano con muchos traspasos.
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El nuevo Mundial de Clubes no es la Champions, pero tampoco un torneo de pachangas veraniegas. Con su agilidad para cerrar fichajes que llegan antes que nunca, los principales equipos europeos están demostrando que se toman en serio el torneo.
La breve ventana de fichajes que se abrirá entre el 1 y el 10 de junio cambia las reglas del mercado veraniego y obliga a los equipos participantes (y a los que no estarán en EEUU) a acelerar en la confección de sus plantillas.
Ejemplo de ello es el Real Madrid. En pleno mes de mayo, ya ha cambiado de entrenador, ha cerrado dos fichajes y llegará al Mundial con más. El City o el Atlético también llegarán reforzados a la cita, aunque el efecto dominó provocado por el nuevo torneo alcanza a todos los equipos del continente.
Aunque los 32 participantes buscan cómo mejorar sus equipos a contrarreloj, el caso de los dos clubes españoles clasificados simboliza este fenómeno.
El Real Madrid busca redimirse de su mala temporada e iniciar un proyecto nuevo. Sin dilación, el equipo oficializó el fin de la era Ancelotti y dio inicio a una nueva etapa bajo la batuta de Xabi Alonso.
En Chamartín no dudaron de pagar la cláusula de Dean Huijsen (58 millones) para adelantarse a sus competidores de la Premier y presentarse en el torneo con un defensa de garantías ante la plaga de lesiones en la zaga blanca.
Y en los últimos días, también se ha hecho oficial la llegada de Trent Alexander Arnold y se ha avanzado en los fichajes de Álvaro Carreras, Angelo Stiller o el regreso de Nico Paz.
A la espera de que se concrete el futuro de jugadores como Rodrygo Goes, las prisas del Madrid evidencian la importancia que se le da a un torneo que premia al campeón con 111 millones de euros.
Si el Real Madrid busca prestigio, corregir el sabor de boca de este 2025 e iniciar con buen pie la andadura de Alonso en el banquillo, para otros clubes, ganar el torneo supondría cambiar su realidad económica en el corto plazo.

Johnny Cardoso disputa un balón en la final de la Conference League ante el Chelsea. Reuters
El Atlético de Madrid decidió en 2024 que había llegado el momento de iniciar un nuevo proyecto y diseñó una revolución dividida en dos fases.
Tras dar salida a 16 jugadores el pasado verano e invertir 185 millones en Julián Álvarez, Alexander Sorloth, Connor Gallagher y Robin Le Normand, ha llegado el momento de dar un paso adelante.
Los rojiblancos tendrán un verano intenso, con varias salidas, renovaciones y fichajes pendientes, pero en el corto plazo, se busca cerrar algunas operaciones antes del Mundial de Clubes.
Ni la continuidad de Griezmann y Koke ni la salida de Correa están garantizadas. Del desenlace de estas operaciones, dependerá la hoja de ruta del equipo.
Pero, mientras se resuelve esta situación, el club quiere cerrar cuanto antes la llegada de su objetivo más claro este verano: Álex Baena. Villarreal y Atlético ya hablan por el centrocampista y por ahora no hay acuerdo.
Los colchoneros buscan rebajar el coste incluyendo a Rodrigo Riquelme en la operación, pero los groguets prefieren recibir una cantidad fija cercana a los 50 millones de euros.
El Atleti también ha esperado a que el Real Betis disputase la final de la Conference League para comenzar a hablar por Johnny Cardoso, prioridad rojiblanca para el puesto de cinco que Simeone lleva años reclamando.
La prioridad atlética es que, como mínimo, Baena llegue antes del 10 de junio y aparcar el resto de llegadas para el verano.
El músculo económico del equipo para reforzar el resto de posiciones, dependerá, de hecho, del rendimiento del equipo en el Mundial y de las bajas que finalmente se produzcan.
Un nuevo City
El Manchester City viene de una temporada para olvidar, 3º en Premier, eliminado en octavos de Champions y derrota en la final de la FA Cup ante el Crystal Palace.
Pero con la vuelta de Rodri y la sed de revancha de jugadores muy lejos de su nivel este año como Phil Foden, Erling Haaland, Bernardo Silva y compañía, el City intentará volver al máximo nivel.
Guardiola renovó con el club para capitanear la reconstrucción de un proyecto necesitado de regeneración y el presidente del equipo, Khaldoon Al Mubarak ha prometido cerrar las principales llegadas antes del Mundial.
Leyendas del club como Kyle Walker y Kevin De Bruyne finalizan su etapa como citizens y jugadores cuyo rendimiento ha sido decepcionante como Jack Grealish abrirán hueco a nuevas incorporaciones.

Reijnders, durante la final de Coppa de Italia. Reuters
El club se fijó en Florian Wïrtz para sustituir al belga, pero su elevado precio y la necesidad de reforzar varias posiciones hizo que los ingleses descartasen su operación.
El mejor posicionado es el francés Ryan Cherki (21 años). La irregularidad es su principal incógnita, pero su buena temporada en Lyon (12 goles y 20 asistencias) y su pacto de caballeros para salir del Olympique por 22 millones de euros lo convierten en una opción más asequible.
El City también busca un ocho con llegada que ejerza el rol de centrocampista con capacidad goleadora que Gündogan (con 34 años ya) siempre ha ofrecido a Pep.
El neerlandés Tijjani Reijnders (10 goles en Serie A este año) es el preferido por los ingleses y ya han presentado una oferta al AC Milan que supera los 60 kilos.
Los citizens también buscan un lateral zurdo y otro diestro, un portero (la continuidad de Ederson está en duda) y un jugador de banda.
Cristiano
Otro terremoto en el mercado de fichajes podría llegar de la mano de Cristiano Ronaldo. El portugués podría ser la guinda del pastel del torneo y Arabia Saudí le quiere en el escaparate mundial.
Su contrato con el Al Nassr expira el 30 de junio y el club intenta convencerlo para renovar, pero el propio jugador ya dejó un mensaje de despedida e incluso Gianni Infantino deslizó que estaba en conversaciones con clubes que participarán en el Mundial.
Tras ser vinculado con equipos brasileños, en las últimas horas cobra fuerza el rumor de un cambio de aires, pero no de país.
Al Nassr y Al-Hilal son rivales históricos en la liga saudí, pero ambos clubes son propiedad del Fondo de Inversión Pública (PIF) del estado y los intereses nacionales podrían pesar más que el deseo de su equipo.
Efecto dominó
La prisa por fichar de los clubes que participan en el Mundial se ha contagiado a todos los grandes de Europa, temerosos de ver cómo se le escapan sus objetivos.
Aunque no estarán en Estados Unidos, el Liverpool es un ejemplo evidente. Los reds vienen de ganar la Premier, pero se están moviendo en los despachos como si tuvieran urgencias.
Ante la salida de Trent-Alexander Arnold, el club se ha movido rápido para cerrar a Jeremie Frimpong por 35 millones de euros. Un sustituto de perfil diferente, pero que también goza del cartel de lateral top en Europa.

Florian Wirtz, tras disputar su último partido con el Leverkusen. Reuters
La bomba de los de Merseyside podría llegar en los próximos días con el fichaje del mediapunta alemán Florian Wïrtz. La operación superará los 120 millones de euros y podría ser el gran movimiento del verano.
El Arsenal tampoco estará en Estados Unidos y tras finalizar la Premier en 2ª posición y caer en las semifinales de Champions, el proyecto de Arteta busca refuerzos para dar el salto definitivo a la máxima élite.
Los gunners tienen muy avanzado el fichaje de Martín Zubimendi y se mueven en el mercado en busca de un delantero y un extremo izquierdo. Nico Williams, Rodrygo, Gyokeres y Sesko, los candidatos.

El guardameta del Espanyol, Joan García. EFE
En una posición similar se encuentra el Barça, que tampoco estará en el Mundial. Aunque los culés vienen de una gran temporada, el club ya se mueve en busca de retoques a su plantilla.
El gran dilema es la portería. La continuidad de Szczesny parece asegurada y el Barça duda de si ha llegado el momento de cerrar la etapa de Ter Stegen y pagar la cláusula (25 millones) de un Joan García tentado por la Premier.
Deco también busca un extremo que pueda dar descanso a Raphinha y Lamine Yamal, aunque lo ideal sería un jugador capaz de jugar en las tres posiciones del ataque.
En ese perfil, gusta Marcus Rashford, en el mercado por 40 millones de libras. Las alternativas son Luis Díaz, Rafael Leão y Nico Williams, pero su precio se escapa al presupuesto culé, por ahora.
El campeón de Italia tampoco estará en el Mundial, pero en Nápoles ya tienen casi cerrado su gran bombazo en el mercado (Kevin De Bruyne) y avanzan en el fichaje de Jonathan David.