Vista panorámica de Vigo
Conseguir piso en Vigo, prohibitivo: "La situación del alquiler es de emergencia habitacional"
Los precios del alquiler no dejan de marcar máximos históricos cada mes y, ante la falta de oferta en la ciudad, no se prevé que mejore el acceso a la vivienda en Vigo.
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"El mercado del alquiler en Vigo está totalmente estrangulado". Así de tajante se muestra Teresa París, coordinadora inmobiliaria en una oficina de la ciudad al ser preguntada por el actual estado del mercado inmobiliario en Vigo. La falta de oferta sigue tensionando mes a mes los precios de los pisos e impidiendo a muchos vigueses acceder a uno de los derechos fundamentales que recoge la Constitución Española.
"Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada", se puede leer en la carta magna de España. Una frase que no corresponde con la situación del mercado inmobiliario de 2025, ni en Vigo, ni en el resto del país. En concreto, en la ciudad olívica, los alquileres han anotado valores récord en abril, según el portal inmobiliario Idealista, alcanzando los 10,8 euros por metro cuadrado.
Agentes inmobiliarios contactados por Treintayseis calculan un precio medio de 1.000 euros para un piso con dos o tres habitaciones —prácticamente la totalidad del salario mínimo interprofesional (SMI)— y aseguran que el principal problema es la falta de oferta, tanto en la ciudad como en toda la comarca. "A día de hoy sigue habiendo poca oferta y bastante demanda, con lo cual, por la ley de oferta y demanda, los precios están altos", afirma el socio y propietario de Posada Inmobiliaria, Alberto Vila.
París está de acuerdo con esta lectura: "El precio está disparado porque no hay oferta". Pero añade un factor que marca la experiencia de muchos inquilinos: las condiciones del contrato, que define como "cada vez más leoninas". Y es que, asegura, hasta personas con buenas nóminas tienen "muy complicado" encontrar pisos "en condiciones". La coordinadora de REMAX argumenta que estas condiciones son justificables para "evitar problemas con los inquilinos".
Sigue habiendo una discriminación en el acceso, especialmente a personas racializadas
Desde el Sindicato de Inquilinas de Vigo-Tui-Baixo Miño, también inciden en que los requerimientos son "cada vez más exigentes", pero desde otro punto de vista. Denuncian que "sigue habiendo una discriminación al acceso, especialmente a personas racializadas o en situación irregular, familias con hijos o personas con animales". De esta forma, son los vigueses y viguesas con menos recursos los que están encontrando menos y peores alternativas habitacionales.
"Emergencia habitacional"
"La situación de la vivienda en alquiler en Vigo es de emergencia habitacional", añaden, al mismo tiempo que señalan como principal causa la especulación. "La ley de oferta y demanda no puede explicar por si misma los precios abusivos con los que nos encontramos", afirman desde la plataforma que inciden en que "hay que tener en cuenta la codicia por querer sacar el máximo beneficio de un bien fundamental".
De las inmobiliarias entrevistadas, tan sólo desde Posada Inmobiliarias confirman que hay "una parte" de los dueños "que quiere aprovechar el momento y subir los precios". Eso sí, aclaran que también hay otros que "les parece que es demasiado alto lo que están pidiendo por sus viviendas".
En esta búsqueda de rendimiento económico, las inquilinas tienen muy claro donde se encuentra la gran mina de oro para los propietarios. "La explicación explica porque no dejan de subir los precios, también porque deciden retirar las viviendas del mercado del alquiler para dedicarlos a un uso turístico", explican.
Alberto Vila también considera que muchos pisos y casas "se han transvasado del alquiler tradicional al alquiler turístico". "Creo que el alquiler turístico está bastante explotado y no se están cubriendo todas las plazas que se ofrecen", añade el propietario de la inmobiliaria situada en el centro de Vigo, que cree que "es probable que acaban tornando otra vez" al mercado habitual.
Las VUT se han multiplicado por cuatro
El auge de Vigo como un destino de referencia para el turista nacional, aunque también se han registrado un incremento de visitas internacionales, ha supuesto todo un shock en el mercado inmobiliario. Como confirman las inmobiliarias, cada vez son más los pisos que se dedican al uso turístico.
Según datos del Instituto Galego de Estadística (IGE), la ciudad olívica ha multiplicado por cuatro el número de viviendas de uso turístico (VUT) desde la pandemia. A 1 de enero de 2024, había 1600 inmuebles registrados para esta actividad, aunque cifras del Rexistro de Empresas e Actividades Turísticas ya apuntan a más de 2.200 VUT en la actualidad.
Como recuerdan desde el Sindicato de Inquilinas, el impacto es mucho más intenso en el centro de la ciudad o en zonas cercanas a las playas. Por eso, concellos como los de Cangas, Moaña, Nigrán o Baiona también registran una mayor proliferación de este tipo de viviendas. "La consecuencia es la expulsión de los vecinos, incapaz de encontrar alternativa habitacional en su barrio", recalcan.
"Son zonas en las que prácticamente sí que no hay nada de oferta y sí que es todo turístico", añade Vila, que aún así considera que el incremento de precios está siendo generalizado en todos los barrios de Vigo y comarca. "Cuando más te vas acercando al extrarradio baja un poquito, pero a día de hoy el precio en una zona como Teis está muy próximo a lo que hace poco era la zona céntrica", afirma.
Los propietarios prefieren vender
Ahora bien, la coordinadora de una de las oficinas de REMAX en Vigo no está de acuerdo con esta explicación del transvase de vivienda habitual a turística. Considera que el propietario que realiza estos cambios es "distinto" y que se tratan de propiedades que han cambiado de titularidad, y son los nuevos dueños quieren las transforman en VUT.
El propietario de toda la vida, el que "tiene una segunda vivienda que la quería para alquilar", en palabras de París, saca su inmueble del mercado de alquiler para colocarlo en la compraventa. La asesora inmobiliaria señala que la inseguridad que sienten los dueños ante posibles impagos que "al final deciden prescindir, ahorrar gastos y, como último recurso, vender las viviendas".
Pero también los inquilinos, como indica Vila, están decidiendo abandonar sus alquileres debido a los altos precios y altas condiciones. Entonces, "optan si pueden por comprar" porque "si tú ganas mil euros, no puedes alquilar algo de 600" y "te compensa ahorrar y comprar". "Tú nómina te limita el acceso al alquiler", concluye.
13.000 viviendas vacías en Vigo
Además, Vigo cuenta con otra característica que afecta directamente a la falta de oferta: las 13.000 viviendas vacías que calcula el Concello que hay en la ciudad. Una circunstancia que apuntan tanto las inmobiliarias como el Sindicato de Inquilinas. "Los bancos no ponen en alquiler asumible las miles de viviendas vacías de sus carteras", reitera la plataforma ciudadana.
Para ellos, Xunta de Galicia y el Gobierno de Abel Caballero han promovido sendas medidas para incentivar que estos inmuebles salgan al mercado. La comunidad autónoma ha sacado una línea de ayudas de 11.000 euros a los propietarios para que rehabiliten sus viviendas y las puedan así alquilar. En la misma línea, Vigo ha invertido 300.000 euros en una prestación similar.
Las inquilinas consideran que este tipo de acciones "suponen una entrega de dinero púnlico que va directa a los bolsillos de los propietarios". "Llevan mucho tiempo hablando de estas medidas pero no he visto ninguna en práctica", asegura Vila, mientras que su compañera del sector libera de responsabilidades a los ayuntamientos, que dependen en esta materia de las actuaciones de las comunidades y del Estado.
