Miguel Assal, experto en primeros auxilios: "Dormir la siesta después de las tres de la tarde no es recomendable"

La siesta es una de las mayores tradiciones de la población española. Aquí, este pequeño parón tras la hora de la comida no desaparece con la infancia. Sin embargo, hay que saber cómo hacerlo para que ese sueño no se vuelva en nuestra contra.

El experto en primeros auxilios Miquel Assal ha dado las claves principales a tener en cuenta para aprovechar este hábito al máximo y que sea beneficioso para la salud. Lo ha hecho en su cuenta de TikTok, donde tiene más de tres millones de seguidores.

En el vídeo, el experto en primeros auxilios también hace una advertencia. Puede que más de uno deba cambiar el horario de este hábito, ya que no se recomienda echarse la siesta a partir de las 15:00h. "Puede afectar a tu sueño nocturno y ese es el más importante".

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Sobre la duración: "Menos de cinco minutos es poco, más de 30 es mucho", señala. Ambas opciones favorecen lo que se conoce como inercia del sueño. Se trata de un estado temporal de somnolencia, desorientación y disminución del rendimiento cognitivo que se experimenta al despertar.

"Más cansado, desganado y malhumorado", resume el experto en primeros auxilios en el vídeo que ha publicado en la red social.

La Academia Estadounidense de Medicina del Sueño la ha clasificado como un tipo de parasomnia, que puede afectar a adolescentes y adultos indistintamente.

En 2006, un estudio de la universidad de Harvard describió este fenómeno como un deterioro del rendimiento cognitivo que ocurre en cuanto se interrumpe el sueño y puede durar decenas de minutos.

Lo ideal, por lo tanto, es dormir entre diez minutos y media hora después de comer. "Lo clavas", ha sentenciado Assal en referencia a esa duración perfecta. De esta manera, se reduce el riesgo cardiovascular y se aumenta la concentración. También favorece la creatividad.

La Fundación Española del Corazón (FEC) también avala este hábito. "La siesta ayuda a disminuir en un 37% el estrés y el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares", dicen los expertos en su web.

Además, dormir la siesta durante este tiempo recomendado mejora el estado de ánimo, recuerda Assal. "Cuando duermes en esa ventana, generas el antídoto del cortisol, la hormona del estrés", desgrana para sus seguidores.

Producir esta hormona en exceso aumenta la intolerancia a la glucosa y a la grasa y debilita el sistema muscular e inmunológico.

Asimismo, reduce los niveles de la hormona del crecimiento, que puede provocar diabetes y enfermedades cardiovasculares, explican desde la Fundación.

Más beneficios

Otro dato que dan, es que facilita la resolución de problemas. "Cuando los sujetos alcanzan la fase REM del sueño, les lleva menos tiempo realizar diferentes conexiones entre ideas". A esto hay que añadirle que fomenta el aprendizaje.

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Un estudio de la Universidad de Berkeley, recuerdan desde la FEC, asegura que quienes duermen la siesta rinden más por las tardes y aumentan en un 10% su capacidad de aprendizaje.

Esto es gracias a que el sueño permite afrontar nuevos conocimientos y fijar los que ya se tienen. Por eso, descansar un poco tras la comida hace más productivos a los trabajadores y que los niños rindan más en sus estudios.

También mejora los reflejos. Un estudio de la NASA realizado con 747 pilotos demostró que los que dormían una siesta al día de 26 minutos cometían un 34% menos errores en el trabajo y duplicaban sus niveles de alerta, cita la FEC.

Aunque a algunos puede pareceres insuficiente la duración indicada por Assal, la ciencia demuestra que nada más lejos de lo contrario. De hecho, investigaciones de Singapur y de Australia ya han dado la misma recomendación anteriormente.